· Edad: 17
·Profesión: Estudiante.
· Familia:
-Padre: Herrero(vivo)
-Madre: Panadera(viva)
-Hermano: Krauss, Jefe Guidario(vivo)
· Arma: Estoque.
· Descripción Física: Alexia es una chica delgada, pálida y bajita, por lo que puede parecer poca cosa a primera vista. Nada más lejos de la realidad. Esta chica de grandes ojos esmeraldas se ayuda de un gran tacón de aguja para aparentar ser más alta, y su cintura avispada no hace más que resaltar su pecho, más grande de lo normal. Tiene un largo cabello de color caramelo que le llega por encima de las rodillas, y es de las pocas cosas que cuida de su aspecto. Suele hacer de modelo de armaduras femeninas para su padre, por lo que suele ir vestida con ese tipo de ropa cuando no lo hace de vestidos de su madre. Tiene un colgante con una piedra preciosa que su hermano le trajo de uno de sus viajes al exterior, y nunca se la quita.
·Descripción Psicológica: Alexia es bastante altanera con los chicos jóvenes a excepción de con su hermano. Desconfía de todo aquel que se acerque a ella sin motivo aparente, pero lo que si puede garantizar es que no tiene amigos por ese motivo. Le gusta hacerlo todo sola y no compartir sus sentimientos. Sin embargo, si consigues excavar bajo esa fachada te encontrarás a alguien sensible y solitario que está deseando conectar con alguien. El único punto débil que considera tener es su familia.
· Historia: Alexia nació en el seno de una familia normal, con un padre trabajador y una madre amable, además de un hermano que la protegía sobre todas las cosas. No tenía nada que envidiar, pues poseía la belleza, la sabiduría y el valor. Una persona con todos esos valores solo podía tener un objetivo: ser Guidario y viajar al exterior, además de traer honor a su familia y ganarse su amor. Concentrándose en su educación, consiguió avanzar hasta los primeros puestos, consiguiendo que todo el mundo supiera cual era su objetivo y conseguir que la trataran como si ya fuera una de ellos a pesar de su corta edad. Con doce años, descubrió la terrible verdad. Su hermano mayor iba a ser Guidario, y con ello se iba a llevar todo el honor que había estado cultivando durante este tiempo. Tras su anunciamiento oficial, Alexia fue envuelta en sombras. Nadie la miraba con el respeto de antes. Cuando se miraba al espejo no veía a la brillante guerrera que iba a viajar al mundo exterior, sino a otra civil más condenada a la gran muralla durante el resto de su vida. Echó a llorar, desesperada. ¿Qué iba a hacer ahora...?
El tiempo ha pasado, y Alexia sigue su vida con normalidad. Hoy es la noche de los fuegos caidos, y tiene preparada unas cuantas sorpresas en la manga.
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